La final del Campeonato Femenino de Fútbol de la Triple Frontera se dirimió por el azar, porque un corte de luz en instancias de penales obligó a las capitanas de Apinta y Victoria elegir suerte con una moneda.
En un partido vibrante entre los equipos de Apinta de Mercedes y Victoria de Curuzú que empataron 1 a 1 con goles de Melisa Martínez de Apinta en el 1º tiempo y Verónica Bastos de Victoria en el 2º, fueron a penales para ver quién se quedaba con el campeonato.
Un imprevisto corte de energía eléctrica dejó sin iluminación al estadio Samuel W. Róbinson cuando se estaban pateando los penales y el equipo de Apinta había convertido los dos tantos ejecutados mientras que Victoria convirtió uno y el otro pegó en el palo.
El corte de luz interrumpió la seguidilla de penales y luego de esperar unos cuantos minutos para que se restableciera el servicio, las jugadoras de ambos equipos decidieron poner punto final a la espera porque estaban muy cansadas, la jornada había comenzado a las nueve de la mañana y el reloj marcaba las 22.
Decidieron entonces llamar al árbitro y echar suertes para definir cual de los equipos sería el primer Campeón de Fútbol Femenino de la Triple Frontera. Es así que una vez de acuerdo el árbitro y las capitanas de ambos equipos; éste tomó una moneda escondió sus manos en la espalda y al exponer ambas al frente la capitana de Victoria eligió la mano con la moneda y de esa forma se consagraron Campeonas del torneo.
Apinta protestó por el modo de resolución pero el fallo fue inapelable porque ambas representantes de los equipos habían consentido en la forma. El festejo de las Curuzúcuateñas no se hizo esperar y al grito "vamo el equipo la pu... que lo parió" se llevaron el ansiado trofeo por el que once equipos lucharon durante toda la jornada del Sábado.
En tercer lugar quedó el equipo local de Psicosis (San Lorenzo) que goleó al combinado de Bella Unión Barra Do Quareím por 4 a 0, con goles de Jésica Playuk, Romina Salinas y Milena Confalonieri en dos oportunidades, redondeando un desempeño positivo que las pone en un lugar de relevancia dentro de los equipos de la región.