Lo dice la Decana de la
Facultad de Periodismo y Comunicación Social de la Universidad Nacional de La
Plata, Florencia Saintout, que aporta su visión sobre los comunicadores sociales de
la democracia.
Desde su puesto,
afirma que quienes conforman la facultad entienden que “quienes han insistido
con la idea del ¨periodismo independiente¨ siempre lo hicieron como mecanismo
de defensa de sus intereses y sus posiciones de privilegio”, remarcando que no
existe el periodismo neutral, “fundamentalmente porque las personas no pueden
ser independientes de sus ideas”.
Así, delimita la
función falsa que cumplía hasta hace algunos años el comunicador social, donde
todo lo que decía era prácticamente incuestionable y la posición desde donde
proclamaba tal o cual cosa era secundaria, innecesaria de saber, informar o
remarcar. No importaba desde dónde hablaba aquel comunicador, sólo lo que decía
¨neutralmente¨.
Pero hoy en día
esa función es cuestionada y Saintout aclara, “nuestras sociedades han puesto en
discusión el lugar de los medios y los intereses que los atraviesan, ya no hay
lugar para la trampa y la mentira de la objetividad que amparaba las acciones
corporativas de los medios”, e invita a “discutir sobre los nuevos
comunicadores que queremos y necesitamos”.
Define y
defiende finalmente, un nuevo marco contextual para el periodismo, no sólo
desde los cuestionamientos sociales, sino también desde la política
latinoamericana, que puja por la democratización de los medios de comunicación,
donde es tan importante lo que se comunica, como decir desde qué lugar se lo
está diciendo. Marco que, hace nacer una nueva generación de comunicadores, aquellos
que ella afirma son “comunicadores de y para la democracia”.
Fuente: Contracorriente.