Alcanzó en el primer trimestre los 96 millones de kilos, apenas un millón por debajo del récord de 2012, destacó el Instituto Nacional de la Yerba Mate.
Entre enero y marzo de este año se cosecharon 96.295.794 kilos, cifra sólo superada en 2012 con 97.696.080.
"Mi opinión es que no va a faltar yerba", aseguró el productor Roberto
Buser, dirigente de la filial misionera de la Federación de Cooperativas
(FedeCoop).
Destacó que "en los últimos años se ha comenzado a cuidar el suelo, se abonó, cosa que no se hacía hace mucho tiempo", y añadió que "las lluvias han sido muy buenas".
Precisamente,, el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) registró más de 1.000 milímetros de lluvia sólo en el primer cuatrimestre.
"Habitualmente llueven 1.000 milímetros en un semestre normal", explicó José Olinuk, responsable de la Estación de Agrometeorología del INTA en Cerro Azul, Misiones.
Precisó que las lluvias, aunque "desparejas, y con una sequía entre enero y febrero, igualmente incidieron en el brotación de los yerbales".
Al evaluar el avance de la cosecha, marzo se destacó como el mes fuerte, y en el que el inicio de la zafra más intensiva duplicó la productividad de los dos anteriores.
En enero la cosecha había alcanzado 22 millones de kilos, en febrero llegó a 25 millones y en marzo trepó por encima de los 49 millones.
De acuerdo con el análisis del INTA, el incremento del ritmo de cosecha desde marzo se apoyó, principalmente, con la entrada en acción de las áreas más productivas, como la zona nordeste de Misiones (Andresito y San Pedro) y la zona centro, que concentra la mayor superficie cultivada de la parte productora y pasó de un promedio de algo más de 6,4 millones de kilos en enero y febrero, a casi 12 millones en marzo.
Destacó que "en los últimos años se ha comenzado a cuidar el suelo, se abonó, cosa que no se hacía hace mucho tiempo", y añadió que "las lluvias han sido muy buenas".
Precisamente,, el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) registró más de 1.000 milímetros de lluvia sólo en el primer cuatrimestre.
"Habitualmente llueven 1.000 milímetros en un semestre normal", explicó José Olinuk, responsable de la Estación de Agrometeorología del INTA en Cerro Azul, Misiones.
Precisó que las lluvias, aunque "desparejas, y con una sequía entre enero y febrero, igualmente incidieron en el brotación de los yerbales".
Al evaluar el avance de la cosecha, marzo se destacó como el mes fuerte, y en el que el inicio de la zafra más intensiva duplicó la productividad de los dos anteriores.
En enero la cosecha había alcanzado 22 millones de kilos, en febrero llegó a 25 millones y en marzo trepó por encima de los 49 millones.
De acuerdo con el análisis del INTA, el incremento del ritmo de cosecha desde marzo se apoyó, principalmente, con la entrada en acción de las áreas más productivas, como la zona nordeste de Misiones (Andresito y San Pedro) y la zona centro, que concentra la mayor superficie cultivada de la parte productora y pasó de un promedio de algo más de 6,4 millones de kilos en enero y febrero, a casi 12 millones en marzo.
fuente télam